jueves, 5 de mayo de 2016




UNA  PENA 

Tengo una pena en el alma,

 

que sólo un beso de ternura

 

o un mensaje de amor bastara,

 

para hacer feliz a mi espíritu

 

 y a mis sumidas entrañas

 

que en su tristeza claman,

 

claman por la paloma mía,

 

que voló por las montañas.

 



Se ha ido en la noche fría

 

con el rocío del alba,

 

tan linda tan bella y hermosa,

 

la mía góndola blanca, 

 

la mía hechicera y alondra.

 

 

Se ha ido, mi paloma:

 

¡qué pena yo tengo en el alma!



domingo, 1 de mayo de 2016

                                                  
  CAMAGÚEYANA MÍA
 
Fuiste cobijo en mi sombra

en mi sombra como amada,

colina de mis caricias,

cazadora de montañas,

la que libaba mi boca,

y endulzaba mi garganta.
 


Yo le cogía los dedos

y su boca devoraba,

como el mar liba las peñas

sin cansarse de besarlas.

 

Le desplegaba las velas

cuando los vientos soplaban,

ella se asía a mis drizas,

y a lo firme de mis jarcias,

y cuando soplaban vientos

yo  arriaba mesana,

entonces cuanto más viento

más andaba la Fragata,

y al levantarse de popa

la proa más penetraba,

y los estays se movían 

por la fuerte marejada,

y cuando paraba el viento

la Fragata descansaba.

 

 

Así pasaba la vida

tan feliz con mi Fragata,

la que llevaba a los puertos

como diosa y capitana,

la que soñaba conmigo

de la noche a la mañana,

dentro de mi camarote

donde las musas contagian,

las delicias marineras

en las tarde solitarias,

libando sus labios puros

toda su boca y garganta.

 

 

Y cuando soplaba el viento

le bajaba la mesana,

ella se asía a mis drizas

y se abrazaba a mis jarcias,

y cuando había bandazos

se quejaba y suspiraba,

porque caía la proa

en profunda pantocada,

y así quedaba dormida,

mas tarde se despertaba,

y se miraba al espejo,

y se fijaba en su cara,

 en su melena sedosa

y sus mejillas manchadas,

de los besos recibidos

de aquel trovero de gavias,

que navego cinco meses

con la más linda Fragata.

 

 

Y todavía recuerda

las dulces glorias pasadas.

y no me pesa decirlas.

y no me pesa contarlas.

fue lo mejor de mi vida

con mi hechicera mulata,.

perla del mar del caribe

que resultó ser mi amada,.

la más bella que yo tuve

la que más glorias me daba,

la que más feliz me hizo

aquella hermosa zagala,

que cuando la veo pasar

y se para en mi ventana,

para mirar donde estoy

dentro o fuera de mi casa,

mas cuando salgo al balcón

me mira, se va, y calla,

y muchas veces le digo,

todavía estás más guapa

ella con media sonrisa

desde allí besa mi cara,

con aquellos ojos brujos

y calladita se marcha,

pero yo la sigo viendo

en la prudente distancia,

ella me vuelve a mirar

si yo sigo en la ventana,

y le recuerdo por señas…,

nuestra vida en la Fragata



                               
EXQUISITA COMO LA NOCHE
 -
Oh luna que brillas en la cima de la noche
arrullando la brisa y el sendero de los vientos
que  me hieren mientras el silencio dormido
se desnuda para verla como ella  se lo besa.
 -
Como la noche más exquisita es ella,
con su largo dorado cabello de estrella
hechizo mío, cual  horizonte soleado
te llevo dentro muy dentro en mi cautela.
 ´-
Como el castillo de mis  suspiros
adéntrame en tus antorchas cautivas
en  tus blandos  molinos la molienda
de una noche  en tus harinas de trigo.
 -
Quiero ir a tus grandes cañaverales
en los suspiros de mis hambrientas liras
por eso ven ¡oh zagalita mía a la sombra!
de la peña en tus candorosos ojos esmeralda.
 -
Esa mirada que me confirman tu amor
de virgen pura como en las edades desnudas
y primitivas para tenerte, acércate calandria mía,
a los palcos de mi vida para ver tu mar de aguas.
 -
Quiero tenerte en mis selvas  encendidas
y en mis playas para hacer primorosa tu vida
en nuestros mares tropicales y todos ellos
bañarte y adosarte todos los días de mi vida.
 -
Quiero ver tu frondosidad  y sentirme en tu fosa 
cuya rosa tiene en la complacencia en demasía
oh, cielo de mis andares y de magos templos ;
ven rosa de mis retinas, vivamos esta ardentía.

 -
Ven que no te veo por las peñas de mí sangre
ni  en la estación solitaria de mi alma
ven evocadora mía que estoy penando por ti
en las más negras sombras debajo de la tierra .
 -
Estoy pidiendo que vengas  a mí
y me salves  de este terrible tormento
que las  sombras  me consumen
en las estepas desoladas que apresta el silencio.

 -
No quiero morir en el destierro del ensueño
no quiero fenecer en la desesperación de estemutismo
ni en la callada soledad cruenta que me consume
que me arrebata las mieles y delicias en tus besos.