QUIERO MORIR AMÁNDOTE
Este amor se derrama
en los suspiros del silencio
más allá de los yunques
que queman el tiempo
donde la vida enarbola
el laurel de la victoria
entre los siete mares
del alma que me bañan.
Quiero morir contigo
en el dulce amor que vivo
que alarga esta vida
en el camino sensitivo
que crepita afanosa
en los laberintos escondidos
que conducen al edén
que encienden tus sentidos
He de amarte más allá
de los ríos del olvido
donde se represa la luz
la memoria que desvela
con la sed que calma
el jarabe de membrillo
y extasiarme hasta morir
con la miel de los recuerdos.
Deseo amarte sin descanso
en las miradas de la aurora
para tenerte en mis adentros
en el tibio cobijo adormecido
de la fría mañana de invierno
que aviva sensaciones escondidas
y envolvernos con arrojo
en nuestros juncos inferiores.
Anhelo calmar esta sed divina
que me apresa en la nebulosa airosa
y me despierta en la posada vespertina
adorándote en las arpas de mi pecho
que derraman las mieles cristalinas
en la gruta iluminada que invita
a esconderte sin descanso
en el habitáculo encendido.
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