Con las plumas de mi boca
deseo escribirte un verso,
en el dintel tus labios,
para llenarte de cielos,
libando el divino aroma
que sale del sentimiento,
en un abrazo sublime
bajo el embrujo del beso,
entre mi boca y tu boca
titilando nuestros cuerpos,
entre tus pechos y el mío
luminoso parpadeo.
Oh,vientos del alma mía
lumbrera de mis lamentos,
amor mío de mi vida
no sabes lo que te quiero,
en el silencio nocturno
y sin verte yo te veo,
y te llamo el amor mío
en este sublime sueño
que se agolpa en mi costado
y me acorrala al tormento,
en estas noches tan tristes,
que a cada momento muero,
por verte, oh, diosa mía
tendida sobre mi pecho.
Locura de amor que brota
de las fuentes del deseo,
por el contacto de bocas
y el roce de los dos cuerpos;
batalla dulcificada
con la descarga del trueno,
con las chispas y relámpagos
la gloria de nuestros miembros.
Y en el parral de tus uvas
veredas de tu suave cuello,
quisiera beber el vino
ese vino que es veneno,
elixir de mis delicias
alfarera de mis sueños.
Tú serás la mía antorcha y fonibusa
la blanca fragata y el crucero,
y la divina caracola de mis pupilas
y la gloria de mi pecho.
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