miércoles, 8 de octubre de 2014

DIAMANTE MÍO



Tu boca  hechicera mía 
son las lunas de mi pecho
y en la noche tenue 
tu blanda  boca nació sirena,
y los diamantes  de tu  boca 
son los que yo quiero.
  
Alondra mía tus ojo de doncella 
son  harinas de avena
y tus pestañas me envenenan 
con tus ojos hechiceros,
tu sonrisa  y tus pupilas 
es el valle  vespertino  de mis cielos.
  
Oh, sole mío tu cabellera 
es la peña que yo abrazo por tus cejas
y tus muslos estrella mía 
tienen tesoros como la rosa y camelia,
y de tu pecho se derriba  
dos montañas de blanda  arena,
y la otra montaña sola se queda 
fresca mirando despierta
que yo vaya  y ella venga 
a las dunas de mi pecho la mía libella.

Ven tesoro mío, amada doncella 
acorrúcate en mis brazos
y duérmete en mi boca 
y en mis divinas e inmaculadas selvas.







No hay comentarios:

Publicar un comentario